Renting particulares Citroën Ami

Una de las características que más me ha sorprendido es la solución de carga del Ami. A pesar de que solamente ofrece carga lenta, esto no supone un problema en la mayoría de los escenarios urbanos, ya que su autonomía está perfectamente adaptada para los desplazamientos cortos típicos de la ciudad. No obstante, el detalle de que el cable de carga no sea retráctil sí podría mejorar, ya que añadiría un toque de comodidad y organización que los usuarios seguramente apreciarían.

Otro aspecto interesante del Ami se encuentra en sus puertas; la del acompañante se abre de forma convencional, mientras que la del conductor es una puerta suicida, lo que aporta un toque único al conjunto. Sin embargo, me gustaría resaltar que, a pesar de su enfoque minimalista, el interior del Ami brinda una sensación de amplitud y luminosidad gracias a su techo de cristal, algo que no esperas en un coche de este segmento y que aporta una sensación agradable.

Conducir el Ami, sin duda, ofrece una experiencia más cercana a la de manejar un vehículo ligero o incluso un kart, dada su agilidad y sencillez. La visión de Citroën sobre este producto como una herramienta de movilidad, más que como un coche al uso, es un enfoque innovador y muy adecuado en el contexto actual. Aunque el Ami carece de lujos como un sistema de sonido propio o aire acondicionado, entiendo que se trata de decisiones deliberadas para mantener su precio accesible y su enfoque utilitario.